El “listening” es una habilidad fundamental en el aprendizaje de un idioma, ya que nos permite entender y comunicarnos eficazmente. Mejorar esta habilidad no solo te ayudará a entender mejor el inglés hablado, sino que también potenciará tu pronunciación, vocabulario y gramática. En este artículo, te ofrezco una guía paso a paso para mejorar tu comprensión auditiva de manera autónoma.
¿Cómo aprender escuchando inglés por tu cuenta?
Aprender a entender lo que escuchas en inglés es importantísimo y, si la fuente es inglés auténtico, mucho mejor. Con inglés auténtico me refiero al que es hablado por personas reales en contextos reales.
Para practicar tu comprensión con este tipo de recursos, es muy importante tener en cuenta que esta actividad es complementaria a tu proceso de aprendizaje; se trata de ti y de tu propio ritmo.
Paso 1:
Selecciona o utiliza el recurso que te haya dado tu profesor. Intenta comenzar con audios o videos breves. (Sobre series, películas y canciones hablaremos luego.)
Paso 2:
Fíjate en el nivel de dificultad. ¿Cómo? Si es muy sencillo, será evidente. Si entiendes entre un 40% y 50%, su dificultad será media, y si solo entiendes entre un 10% y 20%, su dificultad será alta. Es importante que te asegures de esto para que puedas definir qué recomendaciones seguir.
En todos los casos, es mucho más conveniente que cuentes con la transcripción del audio en inglés.
Paso 3:
Una vez reconocido el nivel de dificultad, proponte un objetivo. Tu objetivo puede ser:
- Escuchar e imitar la pronunciación.
- Escuchar y transcribir las palabras nuevas.
- Aprender las palabras desconocidas.
- Identificar nuevas estructuras que no conoces e intentar aprenderlas.
- Reflexionar sobre el mensaje contenido en el recurso.
- Escuchar y preparar una respuesta para el mensaje del audio.
Selecciona al menos uno, ese con el que te sientas más a gusto, y ya puedes iniciar tu práctica.
Te recomiendo que, una vez tengas tu objetivo, definas un tiempo para dedicar a tu actividad e inicies. Independientemente de tu objetivo, intenta lo siguiente:
- Escucha una o las veces que sean necesarias para familiarizarte con el audio. Trata de hacerlo leyendo la transcripción.
- Identifica los puntos más difíciles de comprender.
- Activa tu curiosidad: busca el significado de las palabras, practica su pronunciación, intenta usar la palabra en un nuevo contexto.
- Realiza “shadowing”; es decir, de manera simultánea, repite lo que escuchas. Asegúrate de imitar la entonación propia del inglés.
- Intenta tomar dictado: escucha fragmentos y transcríbelos.
- Si hay algo que no logras comprender, busca ayuda de tu profesor.
Recuerda que podrás hacer esto las veces que quieras y siempre ten en cuenta que, a mayor dificultad del recurso, debes iniciar con objetivos muy sencillos para que progresivamente logres sacar todos los beneficios de la actividad. Ten siempre presente establecer objetivos realistas y ajustados a ti y, por poco que parezca, inicia dedicando al menos 15 minutos diarios a esta práctica.